Editorial · España

No te acerques que me tiznas…

Nos hemos molestado en contarlo: si en la defensa de Cataluña y de España ha pronunciado la palabra «España» una media docena de veces, la de Europa lo ha hecho por lo menos cuatro veces mas. Es el típico discurso europeísta, el que pretende la disolución de las soberanías nacionales para integrarse en estructuras supranacionales. Es decir, la destrucción de España por disolución en lugar de por fragmentación, pero la destrucción de España y la pérdida de su soberanía a fin de cuentas.

Le espeta a Puigdemont la inutilidad de lo que está haciendo con el poderoso y patriótico argumento de que en Europa no le van a hacer caso. A ver, señora Arrimadas: y si en Europa le hicieran caso, ¿qué? ¿Otro gallo nos cantaría? ¿Habría que callarse? ¿Habría que dejarles hacer? ¿Llevarían razón? Que una cosa es que efectivamente Europa en todo esto tenga mucho que ver, económica y políticamente hablando (hasta ese punto de mortal integración exige la bestia babilónica que es la Unión Europea), y otra cosa es poner el énfasis de la cuestión catalufa no en la inviolable unidad e integridad de la patria (y menuda patria es España) sino en el interés que vayan, o no, a despertar en Europa. Y es que para los liberales del butano, gente con gran proyección y miras de futuro, la patria no es España sino Europa. España es poco menos que una provincia y división administrativa mas del Imperio del Mandil, con  sus peculiaridades, historia e identidad, pero poco mas. Y lo de Cataluña sería un mero asunto administrativo comarcal, porque como ha dicho el funcionario europeo correspondiente, Europa no quiere 98 miembros o divisiones administrativas de primer orden formando parte de su engendro luciferino, y esta es la verdadera perspectiva con la que enfocan la cuestión catalufa estos liberales del butano. Se le ve el plumero señora Arrimadas, y a su jefe el señor Rivera, y a su partido; bueno se les ve desde el principio pero sirva esto como otro botón mas de muestra. A ustedes España les importa un comino, no decimos que no les importa en absoluto, sino que les importa un comino, ni mas ni menos.

Nos ha parecido en cambio excelente que la señora Arrimadas nos recuerde que la Unión Europea se hizo precisamente para combatir a los nacionalismos. Aunque nos tememos que no saben, o no quieren saber distinguir los distintos tipos de nacionalismos, o ni siquiera saben o no quieren saber distinguir nacionalismo de patriotismo. Por eso todos ustedes señores liberales demócratas de la España del 78, empezando por la Corona, siempre han estado dialogando, echándose fotos y dándoles palmaditas en la espalda además de miles y miles y miles de millones de euros a estos nacionalistas buenos y demócratas devenidos en esta trágica hora en demócratas no tan buenos. ¿Por qué sera? En cualquier caso muy coherente por su parte, ¿no? Por lo que ¿de qué se quejan ahora? Pues se quejan mientras que al mismo tiempo a esos otros nacionalistas tan malvados y tan malitos de la extrema derecha hay que seguir negándoles el pan y el agua, hay que seguir condenándolos al ostracismo mas absoluto (habiendo comenzado ya, de acuerdo al plan, la penúltima campaña de desactivación), hay que seguir oprimiéndoles y controlándoles sin mas, cual si de una plaga de insectos se tratara, hasta destruirla si es posible, pues ya se sabe que no hay criatura mas mala en este mundo y en esta España que cualquier bicho que tenga la mas mínima apariencia de facha, esa especie de nazi, que es lo peor de lo peor, mucho peor que etarras y catalufos, sin punto de comparación, ¿verdad?

Son ustedes la repera, señores liberales y demócratas, es que se salen. Nosotros somos, por tanto, el verdadero enemigo y siempre lo fuimos, nosotros los fachas de la casposa extrema derecha, entendiendo por tal desde los tíos del saco con la cabeza rapada (que normalmente obedecen órdenes de los mismos gobiernos democráticos y liberales, lo sepan o no) hasta los católicos y ultramontanos mas cerriles e intransigentes (es que hay ciertos tipos de diálogo que, al contrario que ustedes, no va con nosotros) pasando por todas las familias de carlistas y todas las familias de falangistas y de franquistas e incluyendo a todo sencillo español de bien que sencillamente no se avergüenza de su patria ni de su bandera. Nosotros, pues, esta peligrosa y variopinta caterva de nacionalistas de extrema derecha, que no sabemos lo que es el amor a la patria, somos el verdadero problema y siempre lo fuimos, desde el 78 y para el 78, ¿correcto? Menos mal que se hizo Europa para mantenernos a raya. Pues bien, lo bueno de todo esto es que el 78 se acaba pero nosotros seguiremos a pesar de que la parte mala sea que se llevarán ustedes, señores patriotas butaneros de la democracia, a la misma unidad de España por delante, si Dios no lo remedia y si el pueblo decide dejarse narcotizar una vez mas.

Y ya que hablamos del fin del 78 y gastronomía golpista precocinada como un pastel de reformas constitucionales pactadas posiblemente de antemano (y todo esto no sería mas que el necesario condimento circense): ¿Que es eso de que ya hablarán las urnas de verdad? ¿Que es eso de las mayorías de que la verdadera democracia sin trampas van a poner a los catalufos en su sitio? ¿Está enseñando otra vez la señora Arrimadas el plumero? ¿Es que ya sabían a esas alturas los demócratas del butano lo que se estaba cocinando? ¿En la infame reforma constitucional pactada va a haber un referéndum legal? ¿Quizás solo en Cataluña para que la destrucción de España sea legal? ¿O quizás en toda España? Interesante lo de la reforma, a ver como se las ingenian para inocularnos el penúltimo estupefaciente de masas, nos tienen tomada la medida y saben como pastorear a este ovejuno pueblo que solo sabe balar de vez en cuando hasta que le ponen un poco de hierba fresca en el pesebre.

En cualquier caso ya se ve cómo el proyecto mundialista se sigue afianzando, el fanatismo europeísta de todos estos liberales lacayos del lado oscuro de la fuerza es la mejor prueba de por donde están dibujando el horizonte y los caminos que llevan a él. El pueblo de bien debe resistir, pero un pueblo que solo tiene fe en llenar la tripa y en atiborrarse de la ración diaria de vicio y telebasura no será capaz de hacer nada, ni siquiera de balar.

En fin, estos butaneros, o mas bien bucaneros, tan europeístas, tan globalizadores, tan patriotas que se les llena la boca de la palabra «España»… Y es que, como le dijo la sartén Arrimadas/Ciudadanos al cazo Puigdemont/Catalufismo: no te acerques que me tiznas.

Un comentario sobre “No te acerques que me tiznas…

  1. Muchos catalanes se abonan al sentimiento compartido de Cataluña, España y Europa, y sobre todo prefieren sentirse europeos porque esa actitud es una manera de escapar a la presión batasuno-catalufa. En realidad es otra victoria de los separatas porque sin bien en estas personas no encuentran adeptos a la causa al menos si consiguen inculcar la desafección por España, en forma de querer sentirse como ciudadanos europeos mas que otra cosa. El síndrome de Estocolmo tiene otras cosas pero tampoco podemos culpar demasiado a estas personas, mas bien la culpa la tiene la España del 78 y sus instituciones que han estado alimentando a la bestia catalufa desde el mismo 78 mientras que a los buenos catalanes los han ido dejando literalmente abandonados y vendidos. Demasiado es que al menos no hayan caído en la órbita separata. Y los políticos, expertos carroñeros oportunistas, lo único que hacen es aprovecharse de todo esto, por eso Arrimadas y su partido (y otros también), además de la intención ideológica que expone el artículo, no hacen mas que vender las maravillas de Europa. Por eso la gente debe despertar, somos españoles, la ciudadanía de Europa como nación no existe y nunca existió, lo mas parecido fue Roma pero sus ciudadanos eran romanos, no europeos.

Deja un comentario